miércoles, 25 de marzo de 2009

Montaje expresivo




Se dice que está basado sobre la yuxtaposición de los planos en combinaciones que procuran un efecto determinado. No es un medio, sino un fin. El corte se acentúa en este tipo de montaje con el criterio del que se sirve para destacar una idea y sacar al espectador de situación.

Se trata de un montaje básicamente psicológico, pues a veces rompe la lógica de las estructuras tradicionales. El ejemplo más célebre de este caso es el llamado montaje de atracciones de Sergei Eisestein. (Se observa fragmento de documental sobre dicho director)

Montaje relato

Marcel Martin dice que el montaje relato es: “(…) la reunión en secuencia lógica o cronológica, que contenga una historia lógica en diversos planos, aportando cada uno de ellos un contenido narrativo y contribuyendo a hacer avanzar la acción desde el punto de vista dramático y desde el punto de vista sicológico”

Efectivamente, en el montaje relato han de suceder hechos, escenas que dentro de la estructura narrativa constituyan pasos encaminados al logro de una idea. La acción y el diálogo sin inherentes a este tipo de montaje, pues son los elementos que con más fuerza caracterizan a los personajes y aportan desarrollo de una trama determinada. Es posible el tipo de montaje más sencillo, y en ocasiones, el que más comunica, pues no recurre al adorno de su estructura expresiva con recursos de carácter espectacular. Su sencillez no le quita profundidad en cuanto al mensaje que expone, pero sí le da oportunidad para, con un lenguaje claro, sin mucho estilismo artístico, arribar sin mucha dificultad a la comprensión del espectador.

Introducción al montaje




El montaje es la línea de unión que enhebra los fotogramas de un filme, puesto que una película es la sucesión de trozos de diferente longitud, cada uno de los cuales contiene un momento de acción; bien podría compararse el trabajo del montajista con el de alguien que arma un rompecabezas: une fragmentos aislados (planos) que por sí solos comunican algo, pero gracias a la yuxtaposición crean un nuevo significado y conforman una gran obra, un completo relato audiovisual.

Definición

Para J.P. Chartier “el montaje por planos sucesivos corresponde a la percepción corriente por sucesivos movimientos de atención. Así como tenemos la impresión de tener siempre una visión global de lo que se nos presenta porque la inteligencia elabora esa visión con los datos sucesivos de nuestra vista, en un montaje bien hecho la sucesión de los planos pasa inadvertida porque corresponde a movimientos normales de la atención y elabora para el espectador una representación de conjunto que le da la ilusión de la percepción real”

Sergei Eisestein, director ruso es el primer y más importante teórico del montaje, sostuvo que la yuxtaposición de fotogramas funcionaba como una ecuación en la que uno más uno es igual a tres, es decir, de la sucesión de dos imágenes tendremos una sensación diferente siempre de lo que significa cada una por separado.

El montaje maneja directamente el ritmo, la continuidad y el tiempo de una película. El ritmo tiene como denominador los cortes de las tomas, mientras más cortes y menor la duración de los planos el ritmo será más veloz y desenfrenado. De lo contrario se verá un ritmo pausado y lento (se visualizan fragmentos de las películas Requiem for a Dream y Elefante para ejemplificar de manera clara).

El tiempo dentro de una película está determinado también por el montaje, por ejemplo, en una película de dos horas de duración se puede resumir una historia de muchos años, o hacer de un momento una eternidad (ver ejemplos: Gladiador y El acorazado Potemkim)

Aunque existen diversas definiciones de montaje, se destacan tres modos específicos del mismo.